Conocida como el árbol de la buena salud, la papaya (Carica papaya L.) es algo más que una simple fruta exótica. Este fruto de pulpa rojiza y piel amarillenta, y de sabor dulce y suave, pertenece a la familia de las Caricáceas y es originaria de América Central, donde ha sido consumida desde antes de la llegada de Cristóbal Colón al Nuevo Mundo.
La papaya es una fruta muy nutritiva. Es baja en calorías (40 cal/100g) y cargada de nutrientes, especialmente vitamina C y A. Posee también fibra soluble (pectinas), vitaminas B1, B3 y B6, y minerales como el calcio, el hierro, el magnesio, el fósforo y el potasio. Además, contiene una gran cantidad de enzimas digestivas similares a la pepsina humana y resistentes al pH gástrico: la quimopapaína y papaína. Es por ello que la papaya se ha utilizado de forma tradicional en los países de origen como un remedio natural para facilitar un buen funcionamiento del sistema digestivo y mejorar los trastornos asociados a él (dolor e inflamación de estómago, diarrea y estreñimiento, acidez, etc). También se ha usado tradicionalmente en cremas faciales por su efectividad como limpiador de piel, en el tratamiento de eczema, parásitos intestinales, úlceras y otras enfermedades.
La papaína presente en la papaya es un agente digestivo muy efectivo debido a su capacidad de acelerar la conversión de proteínas de la dieta en aminoácidos. Pero lo que probablemente la convierte en un alimento único es su capacidad de alcalinizar nuestro cuerpo. Por eso puede ser especialmente útil contra la acidez estomacal. Además, gracias a su contenido en fibra soluble, actúa como regulador intestinal ayudando a la evacuación en casos de estreñimiento y diarrea.
La papaya juega además un importante papel en el bloqueo de la histamina. El bloqueo de los receptores de histamina reduce la producción de ácido gástrico, que unido al papel de las enzimas en la digestión, produce una interesante sinergia en el cuidado intestinal.
Hoy en día es fácil encontrar papaya en el mercado, pero un buen consejo es adquirirla madura y a ser posible que haya madurado en el árbol, para así conseguir todas las propiedades beneficiosas de la papaya. También podemos optar por preparados de puré de papaya madura.